Hoy no es viernes, pero hemos dedicado unos minutitos al Emocionario. Hoy hemos descubierto la emoción que trabajamos durante toda la semana pasada.
Después de varios intentos, como en semanas anteriores la han vuelto a adivinar.
Esta emoción está representada por un zorrito desolado en medio de una laguna, las plantas parecen arroparle y los peces lo acompañan.
Diego creía que esta semana estábamos hablando de la depresión, el zorrito estaba un poco deprimido.
David P. y Vega han dicho que podía tratarse de la tristeza. Aunque, en cierto modo, está relacionada con ella, no es esa emoción, además la tristeza la descubrimos la semana anterior.
Lucas creía que se trataba del miedo y Beltrán P. de la amargura.
Y entonces Lidia ha dicho: ¡Ya lo se! Es la compasión.
El Emocionario nos indica que hay quienes la llaman "conmiseración" o "lástima".
La compasión es la pena que nos provoca la desgracia de los demás.
¿A qué nos motiva la compasión?
Nos motiva a ayudar a quien está sufriendo. Puede ser un pariente o un desconocido. Incluso puede tratarse del personaje que habita en un libro, como un zorro que ha perdido a su familia. Eso nos despierta el deseo de abrazarlo para aliviar su tristeza.
Si un ser querido lo pasa mal y no lo ayudamos, es muy probable que entremos en el territorio del remordimiento.
¿Han sentido alguna vez mis alumnos compasión?
David G. siente compasión cuando su hermano pequeño se pone a llorar. Nos cuenta que para que su hermano se sienta mejor, se queda con él para jugar.
Alba nos ha contado que ella siente compasión cuando su hermano se pone malito. Ella se acerca a él y le da muchos mimos.
Lucas siente compasión cuando su madre se hace daño. Para que su madre se sienta mejor, él le da besos y no se mueve de su lado.
Laura siente compasión cuando a su hermana la pediatra le pincha. Nos ha contado, también, que ella la entretiene diciéndole que viene un "perrete", y es que a Elsa le encantan los perros.
Mario, como siempre, nos sorprende con su experiencia. "Sentí compasión de mi mismo el día que me pille los dedos. También me consolé a mi mismo hasta que me quedé dormido"
Silvia nos ha contado que ella sintió compasión cuando su padre, que es mecánico, se dio con un martillo en el dedo y se le cayó la uña. Estuvo con él mucho rato.
Vega siente compasión cuando su hermano se cae. Intenta consolarle abrazándole fuerte.
Sergio sintió compasión cuando su hermano Marcos se pilló la mano. "Lo tranquilicé y le puse algo frío para que se le quitara el dolor".
Alicia siente compasión cuando su hermano quiere un juguete y no se lo dan. Ella le da una muñeca suya.
Marta sintió compasión cuando operaron a su madre de la espalda. Para que se sintiera bien, Marta le hizo un masaje.
Beltran P. siente compasión cuando su padre regaña a su perro. Beltrán le acaricia.
Cristina sintió compasión el día que su padre se arañó con un coche y se hizo daño, también es mecánico. Ella alivió su dolor estando con él.
Lidia sintió compasión un día que su hermana se cayó por las escaleras. Intentó calmarla y estuvo mucho tiempo con ella.
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