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domingo, 12 de junio de 2016

La euforia

Fue hace dos semanas cuando trabajamos esta emoción, pero entre los preparativos de la fiesta y otra multitud de cosas que se van acumulando no he tenido tiempo de subir.

Aunque la imagen que representa esta emoción es bastante descriptiva, adivinarla era un tanto difícil para mis alumnos, porque, aunque muchas veces mis alumnos la han sentido, la palabra que la designa no se encuentra en su vocabulario.


Tenían muy claro que era una emoción positiva y la relacionaron con la felicidad y la alegría.
Fue Beltrán P, el que nos la desveló, ya que tiene en casa el Emocionario.

El Emocionario nos indica que la euforia es un desbordamiento de energía positiva. Te brinda la fuerza para enfrentar momentos de adversidad o para festejar con un entusiasmo muy por encima de lo habitual.

¿Qué caracteriza a la euforia?

El extraordinario bienestar que experimentas. Por eso te muestras tan optimista y crees que puedes superar cualquier reto.

¿Cuándo se han sentido eufóricos mis alumnos?

Cristina cuando ganó el Real Madrid.

Alba siente euforia cada vez que ensaya el baile de fin de curso, y es que es una gran bailarina.

Lucas sintió euforia cuando su perrito tuvo bebés.

David G. se sintió eufórico un verano que se fue a Oliva de vacaciones.

Lidia cree que sentirá euforia cuando su tía Amparo tenga bebés, que aún no se ha casado, pero ya tiene la casa. 

Jonatan se sintió muy eufórico cuando su padre le trajo dos gatos bebé.

Mario sintió euforia cuando se fue a dormir a la casa de unos amigos suyos muy cerquita de la playa.

Vega sintió euforia cuando sus padres le dijeron que le iban an comprar un gato.

Silvia se sintió eufórica cuando fuimos a Faunia.

Adrián sintió esta emoción en la feria de Delwende.

Laura se sintió super eufórica cuando fueron Mario, Martina, Marta e Irene a su casa.

Carolina sintió euforica cuando fue a Italia y a Francia.

Diego cuando su padre le regaló un hámster.

Beltrán P. sintió euforia cuando su perro supo volver a su casa.

Marta nos contó que ella se siente eufórica cada vez que se va a la playa.

Alma cada vez que juega con su gato y su conejo siente euforia.

Miguel siente euforia cada vez que va a MarinaDor.


Puedes adquirir el libro Emocionario aquí.



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