El viernes continuamos aprendiendo nuevas emociones.
Esta semana era difícil, y aunque lo intentaron, no consiguieron adivinar la emoción que transmitía la ilustración.
Se trataba de un "humano" sumergido en el agua hasta la nariz. Su cabeza estaba unida a la cabeza de un pez, y de su alrededor emergían diversos tentáculos.
Jonatan nos dijo que era una imagen bastante rara.
Carolina creía que se trataba del miedo, y aunque la imagen si podría transmitirnos miedo, esa emoción ya la hemos trabajado.
Alba apostó por la soledad, y Lidia por la tristeza, emoción que ya habíamos trabajado anteriormente.
Después de varios intentos fallidos les dije que se trataba de la incomprensión.
La emoción correspondiente con la imagen de esta semana era la incomprensión.
El Emocionario nos indica que la incomprensión nace de la falta de entendimiento con el otro. Intentamos explicar algo que nos ocurre o que pensamos, pero la otra persona no nos entiende.
En ocasiones nos sentimos incomprendidos porque algo que hacemos no encaja con la opinión de los demás. No te preocupes, piensa en Leonardo da Vinci y en otros genios: todos tuvieron que enfrentarse a la incomprensión. Su pensamiento no concordaba con la época en que vivían.
¿Cómo surge la incomprensión?
La incomprensión surge de un desajuste entre cómo ves tú el mundo y cómo crecen los demás que lo ves. Es una mezcla de frustración y desamparo.
¿Cuándo han sentido mis alumnos incomprensión?
Jonatan nos indicó que ese mismo día sintió incomprensión. Nos ha contado que antes de venir al cole ha estado hablando con su madre por teléfono pero su madre no le entendía porque había mucho ruido. Él intentaba decirle que ya se iba al cole, pero su madre no consiguió entenderle.
Lidia dice que algunas veces su hermana le pregunta algunas cosas pero que ella al explicárselas, se da cuenta de que no le entiende porque es pequeña.
Adrián se siente incomprendido cuando le dice a su abuela Loli que el Sol es una estrella. Nos dice que su abuela no le entiende porque es viejita.
Vega se sintió incomprendida una vez que le dijo a su hermano que se iban al parque y él no se enteraba de nada.
Mario sintió incomprensión en la casa de sus primos, vio una estrella fugaz pero su madre no le hacía caso.
Alma se siente incomprendida cuando habla con su primo José Alberto y él no le entiende.
Álvaro se siente muy incomprendido cuando tiene hambre y se lo dice a su madre, pero ella le dice que se espere que aún no es la hora de comer.
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